Este artículo es del experto en hierbas Steven Horne.
El jengibre es una especia muy común disponible en cualquier tienda de comestibles y se utiliza para dar sabor a las galletas de jengibre, el pan de jengibre y la cerveza de jengibre. El jengibre sólo es superado por el pimiento en cuanto a sus efectos estimulantes. Mientras que el pimiento estimula sobre todo la circulación, el jengibre actúa principalmente sobre el sistema digestivo.
El jengibre estimula las secreciones digestivas y aumenta la motilidad intestinal. Esto significa que ayuda al cuerpo a digerir mejor los alimentos y también ayuda a aliviar el estancamiento digestivo, aliviando los gases, la hinchazón y la indigestión.
Jengibre y mareo
Daniel B. Mowrey, autor de La validación científica de la fitoterapia, publicó un estudio sobre el jengibre para el mareo y las náuseas en la revista médica The Lancet en 1982. Él y su compañero de investigación descubrieron que la ingestión de jengibre prevenía eficazmente el mareo por movimiento y reducía o eliminaba las náuseas matutinas.
La capacidad del jengibre para aliviar el mareo y las náuseas está relacionada con sus efectos digestivos. Las náuseas se producen cuando se invierte el movimiento peristáltico del intestino delgado. Normalmente empuja hacia abajo, pero cuando empieza a empujar hacia arriba, hacia el estómago, aparecen las náuseas. Si esta inversión del peristaltismo persiste, se produce el vómito. El jengibre alivia las náuseas y evita los vómitos estimulando el movimiento descendente de los materiales en el intestino delgado.
Jengibre para el resfriado y la congestión
Las hierbas picantes como el pimiento, el jengibre, el ajo y la mostaza son algunos de los mejores aliados para las dolencias agudas que cursan con fiebre, escalofríos y abundante mucosidad acuosa o blanca. Hierbas como el jengibre sirven para diluir y expulsar la mucosidad e inducir la transpiración. Es útil beber una infusión caliente de jengibre fresco o seco. Un remedio popular es un té hecho con rodajas de jengibre fresco, limón y un poco de miel.
También es útil utilizar jengibre en el baño. Ponga un par de cucharadas de jengibre seco en una bolsa hecha con estopilla u otro tejido e introdúzcala en una bañera con agua tan caliente como pueda tolerar cómodamente. Sumérjase en la bañera durante al menos 15 minutos, manteniendo el baño caliente. Puede ser útil untar las zonas sensibles con un poco de aceite de oliva para que el jengibre no las irrite. Los baños de jengibre pueden ser útiles para aliviar tanto dolencias agudas como dolores musculares y articulares.
Uso del jengibre
El jengibre funciona bien en cápsulas o en forma de té, pero también se puede utilizar en diversas formas alimenticias. He comido jengibre encurtido o confitado y he bebido cerveza de jengibre para facilitar la digestión. También he hecho zumo de jengibre fresco con limón y manzana como tónico digestivo.
En Dispensario de hierbas modernasEn la lista de productos, incluyo una fórmula que he creado llamada ginger magic (magia de jengibre) que me parece estupenda para combatir los resfriados y la gripe y para calmar el malestar estomacal. También tiene propiedades antiinflamatorias. Para prepararla, empieza haciendo zumo de jengibre fresco con un exprimidor de verduras. Mide la cantidad de zumo de jengibre y añade una cantidad igual de glicerina (o miel). A continuación, añada ¼ de esa cantidad de brandy o ron especiado. Así, si has añadido 1 taza de glicerina, añadirías ¼ de taza de brandy. Para utilizarlo, toma de 1 a 3 cucharaditas con agua cuando estés enfermo o tengas malestar estomacal.
El aceite esencial de jengibre también puede utilizarse, pero debe diluirse. Para utilizarlo internamente, diluya 1-2 gotas en un poco de aceite fijo (aceite de oliva o de coco). El aceite de jengibre también puede diluirse en un aceite fijo y aplicarse por vía tópica para aliviar los dolores articulares y musculares.
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