Why coffee isn’t a great diet hack

taza de café

Resolverse a perder peso es un propósito muy común en esta época del año y, sin duda, hacer más ejercicio y llevar un estilo de vida más saludable son siempre buenas ideas.

A veces, sin embargo, los propósitos vagos sobre la pérdida de peso pueden llevar a tomar decisiones poco saludables, y someterse a una dieta extrema para reducir calorías suele entrar en esa categoría.

¿Otra herramienta potencialmente problemática para perder peso? El café.

El café no es del todo malo. Está repleto de antioxidantes y beber café solo puede ayudarte a procesar la glucosa. Johns Hopkins ha publicado un divertido artículo en el que se describen algunos de los beneficios de beber una cantidad moderada de café..

La cafeína del café también es un estimulante, lo que puede aumentar el metabolismo, que a su vez quema más calorías a lo largo del día. Por eso muchos suplementos populares para adelgazar contienen cafeína. A mí no me gusta cómo me hace sentir el exceso de estimulantes, y por lo general nunca los consideraría en un régimen de pérdida de peso, pero muchos encuentran valor en ellos.

Por otra parte, una idea errónea muy extendida es que el café frena el hambre. Esto es discutible. En este estudioA las mujeres con sobrepeso y obesas se les dio agua o café solo con el desayuno. A lo largo del día, las mujeres anotaron cómo se sentían. Estos son algunos resultados interesantes que no ayudan necesariamente a los partidarios del café:

1) Los niveles de apetito fueron los mismos en ambos grupos.

2) Los bebedores de café deseaban más los alimentos dulces que los bebedores de agua.

3) Los bebedores de café tenían mayores niveles de triglicéridos.

Es necesario realizar más pruebas para demostrar los resultados reales del uso del café para frenar el hambre, pero lo que sabemos es que el consumo de café no es una dieta infalible.

Si decide consumir café (como yo), la clave está en la moderación. Beber cantidades excesivas de café para calmar el hambre es una práctica peligrosa y poco saludable. Todos los beneficios que ofrece el café se esfuman si decides pasarte.

Según Johns Hopkins, una cantidad saludable de café es de 3 a 5 tazas (8 onzas) para hombres y mujeres que no estén amamantando o embarazadas.

Lo mejor es evitar añadir edulcorantes y/o nata. Si no puedes tomar café solo, prueba a utilizar sirope de arce puro en pequeñas cantidades.

 

Foto de Brigitte Tohm en Unsplash